Son sin duda tronchantes estas rimas. Llenas de humor, sorpresa y absurdo se completan con unos fantásticos dibujos que determinan el sentido último de algunos de los poemas. Son burlonas y políticamente incorrectas y desde luego alejadas del lirismo pero siempre buscando los dobles sentidos, el juego con las palabras y unos conseguidos ritmos en los que tiene mucho que ver un buen traductor. Una forma irreverente de entrar en la poesía, pero sin duda se trata de otra voz, la de la risa y el humor.
Antología poética de temática variada, que caracteriza la obra de su autor; emoción íntima en donde la naturaleza se hace eco del sentimiento y la realidad misma se torna poesía, desde el ciprés o río hasta la inmensidad contenida como pájaro-ilusión o estrella-esperanza, en el universo todo. Poesía en memoria de otros poetas, de los propios sueños, recuerdos…
Adivinanzas, juegos, canciones, recetas y consejos… en unos poemas donde las palabras fluyen y se ordenan como en las notas de un pentagrama o la yerba de los prados, donde los pájaros sueñan, el poeta regala nomeolvides a las estrellas, la hoja se hace pez, las nueces son cerebros de nogal, el cocodrilo se perfuma con hojas de tilo…
Un conjunto de cuarenta y ocho poemas de Juan Ramón Jiménez, Federico García Lorca y Rafael Alberti sirven para que los niños y niñas aprendan a disfrutar de la poesía, con temas sencillos, como el mar, los árboles, las flores, el campo, las estaciones del año…, mediante versos fáciles de memorizar.
En una ocasión, la madre del pequeño pingüino se puso furiosa y le gritó terriblemente, Después se arrepintió y dijo: ¡Perdón!
es un libro delicioso para los más pequeños: la historia no puede decir más con menos palabras (Ana Garralón en Educación y Biblioteca).
Madrechillona es una pequeña joya, tanto por su contenido como por su presentación (Paco Abril en La oreja verde).
Madrechillona es una oferta literaria a niños muy pequeños, que les propone iniciarse en la metáfora. En este caso, una metáfora de las emociones logra, con acierto, belleza (y sin edulcorantes) presentar un aspecto complejo de la experiencia humana y nuestra relación con los otros (María Cecilia Silva-Diaz en Babar)
Algunos de los premios obtenidos por este libro: Eule des Monats del mes de Diciembre, otorgado por la redacción de Bulletin Jugend & Literatur. Premio Austríaco al libro del mes de Febrero de 2001 . Premio Alemán al Libro Innfantil (álbum) 2001. Seleccionado por el Gremi de Llibreters de Catalunya para el Premio Llibreter 2001, álbum il.lustrat. Seleccionado por la Fundación GSR y la CEGAL para el catálogo Libros con dos miradas.
Las estaciones del año son el tema de un recorrido poético lleno de imágenes que resultan reconocibles para los lectores. Los elementos de la naturaleza cobran vida y se convierten en personajes, con el apoyo de unas ilustraciones que van cambiando sus tonos con las estaciones y enmarcan los versos con decorativas cenefas.
Sophie enseña a transformar estos elementos intangibles en narrativas pictóricas mediante el uso de materiales tan insólitos y cotidianos como las virutas de madera o el polvo de los lápices, las cebollas o las hojas.
Este libro, desarrollado a partir de talleres infantiles, es una auténtica fiesta visual que estimula el rico mundo imaginativo de los más pequeños.
Es tan sencillo que los niños pueden usarlo sin ayuda de los adultos y resulta perfecto como actividad escolar o para el tiempo libre, pues incentiva el dibujo, la escritura creativa y la creación de libros.