"La mujer loca" de Juan José Millás
¡A la realidad, que le den!
En épocas de crisis de lo primero que se quita la gente es del marisco y de la filología. Julia trabaja en una pescadería y estudia gramática porque tiene un novio filólogo, Roberto. A veces algunas palabras o frases con problemas se cuelan en su habitación, también de vez en cuando personas imaginarias se pasean por su cabeza. Esto es lo que dice el autor que le dijo Millás que había dicho Julia. La protagonista, que es un ángel, va a vivir a la casa de Serafín Marbas (ángel y demonio) y de Emérita, enferma terminal, resulta que la vivienda es la misma en que estuvo Millás en su juventud y en la que su amiga María sufrió un brote psicótico. A través de Carlos Lobón , de la organización Derecho a una muerte digna, con quien Millás ha trabajado y que ayuda a Emérita, el autor se introduce en las vidas de estos personajes. Ahí conocerá también a Camilo, un cura de barrio que proporciona marihuana a Emérita para aliviar el dolor. Al mismo tiempo Millás, junto al Otro Millás, visita a Micaela, una psicoterapeuta octogenaria, con la que discute sobre el valor de lo verdadero y lo falso, lo original y la copia, la ficción y la realidad, mientras redacta su Diario de la vejez.
Escrito en principio con forma de reportaje periodístico el relato se va transformando al poco en una novela que se construye a sí misma y en la que se debate sobre su propia naturaleza, con maestría y humor. Para disfrutar un buen rato observando la fragilidad de las fronteras de la realidad, el poder de la Lengua para forjar psicologías y caracteres y aprender que aunque las palabras no son las cosas que nombran tienen un poder creativo difícil de sujetar. Si los artículos periodísticos de Juan José Millás son un regalo que esperamos con ansiedad por su capacidad de observar, sintetizar y comunicar certeramente, sus novelas no dejan de sorprendernos por la mirada siempre inesperada sobre una realidad más inconsistente de que lo que acostumbramos a pensar. Hay que leer a Millás y a la realidad que le den.
Chema Aniés, Librería Anónima (Huesca).