“¿Qué puedo esperar?” de Britta Teckentrup

Llega un momento en el que crecer se convierte en una tarea pesada. La sociedad se lo pone cada vez más complicado a los pequeños con tanta tecnología, tanta sobreinformación y todo tipo de distracciones, de respuestas trituradas que se reproducen y se copian a sí mismas.

Las preguntas parecen haber desaparecido del mapa cuando son muy importantes para aprender, para cuestionarse, para indagar. Más todavía en un momento como el actual.

Por ese motivo, porque está constituido por casi un centenar de preguntas y ni una sola respuesta, y porque la obra de la autora viene siendo una sorpresa libro tras libro, os recomiendo “¿Qué puedo esperar”? de la creadora alemana Britta Treckentrup, publicada por Libros del Zorro Rojo.

Este libro llegó a finales de febrero a la librería, poco antes del cierre y el confinamiento, y no me gustaría que pasara desapercibido.

Britta Teckentrup motiva a los pequeños a reflexionar sobre ellos mismos y su lugar en el mundo con una colección de preguntas sin hilo aparente, que van de lo concreto a lo metafórico, de lo individual a lo colectivo. Las ilustraciones son muy simbólicas, puedes fijarte en el horizonte pero también en el detalle.

Por ejemplo, algunas de las preguntas que más me gustan: “Cuando sea grande, ¿cómo veré el mundo?” / “¿Por qué siempre choco contra un muro? ¿O es que los muros están dentro de mi cabeza?” /“¿Es malo ser diferente?” / “¿Te parece que el mundo es mucho más grande cuando contemplas el mar?” / “¿Por qué donde hay mucha gente a veces nos sentimos solos?” / “¿Por qué las multitudes parecen enfadadas?” / “¿Es más importante el sueño o la realidad?”

La lectura de este libro nos plantea un interesante juego filosófico e invita a los peques a detener un poco el tiempo. A formular sus propias preguntas, en palabras y en imágenes. Hay una época en sus vidas en la que esto les resulta muy natural. Tienen la cabeza llena de preguntas y sólo tienen que fluir.

¿Qué os parece? ¿les animamos a pensar?

Sara Sánchez / Librería El Puerto (35 formiguetes)